©  Fernando Martín García. Todos los derechos reservados. Ruta del Agua 1 Objetivo: Conocer el origen del nombre de Candelario y la importancia del agua en el entorno del mismo. Vamos a empezar esta ruta en la Plaza del Humilladero. Lo primero que nos llama la atención es el contraste de la arquitectura popular de Candelario con las nuevas construcciones. Tenemos la Ermita del Cristo del Refugio dándonos la bienvenida al entrar a Candelario y podemos observar restos de la antigüa plaza de toros, como el balcón de la Presidencia, ya que antes en esta plaza se hacían las corridas de toros en las fiestas. También podemos ver una regadera. ¡¡ VAMOS A SEGUIRLA HASTA SU ORIGEN !! Seguimos la regadera calle arriba, por la calle Pedro Muñoz Rico disfrutando de la arquitectura, y enseguida nos encontramos con la fuente de Perales, de la que podemos beber el agua pura y fría de la sierra. Seguimos la regadera y la calle empinada, ahora de Enrique Fraile hasta llegar a la fuente de La Cruz de Piedra y entrada al antigüo barrio judío de Candelario, hoy llamado “ de los perros”. En este punto dejamos por un momento la regadera para visitar la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y la cuesta de La Romana, uno de los rincones más bonitos de Candelario. Volvemos a la fuente de La Cruz de Piedra y seguimos nuestra regadera, con su agua cristalina, hasta llegar a su nacimiento en “ El Chorrillo “. Podemos observar una pila de piedra en la misma regadera, es una pila para lavar la ropa, utilizada antigüamente para tal fin. Nos sentamos en los bancos para observar el paisaje y vemos un pinar de repoblación, bosque de castaños y roble autóctono y algunas especies de bosque de ribera como el abedul y el aliso. Seguimos la carretera que nos conduce a Navacarros y llegamos a dos antigüos molinos a los lados de un puente romano. Lo cruzamos y en la pequeña subida que encontramos, a la derecha, está la fuente de Los Lapachares, auténtica fuente romana. Al acabar la subida, a la izquierda, sale un camino hacia abajo que nos conduce hasta un gran lavadero de ropa, donde antigüamente iban las mujeres a lavar. Es un lavadero de invierno, con tejado, y al lado está el lavadero de verano, aunque es un poco difícil de ver a causa de la cantidad de maleza que hay. Hemos llegado a un merendero, donde hacemos nuestra siguiente parada a orillas del río. Si hacemos la ruta en verano, podemos ver la cantidad de candela (flor del castaño) bajando por el río. Antigüamente había muchos más castaños y la cantidad de candela era mayor. Se cree que el nombre de Candelario es la unión de CANDELA + RIO = CANDELARIO. Seguimos nuestra ruta siguiendo la callejuela que nos lleva a las calles de Candelario, en pleno casco urbano. En este punto, callejeando por el corazón de la Villa, damos por terminado nuestro paseo.